El gobierno de Donald Trump ha despedido a casi la mitad de los investigadores del programa de vigilancia epidemiológica de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos. Esta medida afecta a aproximadamente 70 de los 140 especialistas conocidos como “detectives de enfermedades”, quienes han sido notificados de su cese.
Estos despidos se producen en un momento crítico, ya que el país enfrenta la amenaza de una posible pandemia de gripe aviar. El virus H5N1 ha infectado a cerca de 70 personas en Estados Unidos desde principios de 2024, resultando en al menos una muerte. Expertos advierten que, si el virus muta, podría desencadenar una pandemia de graves consecuencias.
Los investigadores afectados forman parte del Servicio de Inteligencia Epidemiológica, un programa de élite de los CDC reconocido por su labor en la investigación y control de brotes epidémicos a nivel mundial. Su trabajo ha sido fundamental en la erradicación de enfermedades como la viruela y en la gestión de crisis sanitarias internacionales.
La decisión de reducir el personal en este sector clave ha generado preocupación entre la comunidad científica y médica. Amesh Adalja, especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad Johns Hopkins, señaló que cualquier intento de desmantelar este programa tendrá un impacto directo en la seguridad nacional y la salud pública de Estados Unidos.
Estos despidos se enmarcan en una serie de recortes ordenados por el presidente Trump, quien ha instruido a Elon Musk, encargado de supervisar el gasto federal, a reducir los presupuestos de diversas agencias gubernamentales. Además de los investigadores de los CDC, se reporta que cerca de 1,300 empleados adicionales han sido despedidos, representando aproximadamente el 10% de la plantilla total de la agencia.
Fuente: Excélsior
