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martes 29 de abril del 2025.

Dirección: Héctor Javier Mendoza Zubiate

En la voz de Paola Rodríguez: Los de Izquierda o los de Derecha traicionan

Hace algunos días me encontraba platicando, con un amigo uruguayo que se encuentra viviendo en Australia, un poco acerca de la política mexicana, sus contrastes y las políticas del actual partido que gobierna el país. Entre la plática, me hizo una pregunta dirigida en el sentido de que, si existe algún partido político en México con el que sienta afinidad, o alguno que se alineé, aunque sea un poco, a mi forma de pensar y a mis valores.

Esta pregunta me resultó, más que compleja, difícil de explicar. Esto, por la sencilla razón de que nuestros partidos políticos, cual sea que señalemos, carece por completo de identidad.

Es un cuestionamiento que va más allá de las preferencias o inclinaciones políticas, porque la verdad es que ninguno de los partidos políticos que tiene hoy México, sabe quién es y hacia dónde va. Lo que sí tenemos, son partidos políticos que llegan con los votantes que tienen cierta línea ideológica y que se supone alineados al estatuto del partido, pero que permiten que sus líderes traicionen esos mismos ideales por intereses propios, por una propia agenda, o porque “así va la tendencia”. Y esto es, tanto en la “derecha”, como en la “izquierda”.

Realmente, en nuestro país no existe una clara división entre estas dos tendencias ideológicas, culturales y políticas, sino que depende necesariamente del líder en turno que esté ejecutando determinadas políticas en determinado territorio.

Pues claro, entonces es natural que como país no veamos qué rumbo elegir, si nuestros propios líderes no saben a quién o qué representan. Además, los mismos partidos se encuentran fragmentados en su estructura interna, y hay un montón de divisiones y subgrupos que representan, cada uno, intereses e ideas contrarias entre sí.

Por ejemplo, digamos que el estatuto de un partido advierte claramente que se debe respetar, y defender, la vida desde su concepción y a la familia como el núcleo de la sociedad, pero dentro de ese mismo partido existen líderes y grupos que abiertamente apoyan, y promueven, políticas públicas contrarias a la protección de la familia y de la vida desde su concepción. Entonces, quienes votan por ese partido, ¿es por cuestión verdaderamente ideológica?, ¿por lealtad?, ¿porque no hay otra opción?

Y no sólo pasa con un partido, pasa en general. No somos ajenos ante el hecho de que el partido que actualmente gobierna a la nación, llegó con la bandera política de “verdadera izquierda”, promoviendo una supuesta “justicia social” que terminó traicionando a sus votantes, en todo sentido, con una sarta de decisiones arbitrarias que ha tomado y que esas decisiones tienen lo de justas lo que tiene Morena de tendencia política de derecha.

Resulta bastante lógico que un partido político gane o pierda territorio conforme la congruencia de su discurso, identidad y políticas a implementar.

En México no tenemos ningún partido que sea claro en su discurso y en su accionar. No tenemos un partido de derecha y ciertamente la supuesta izquierda que existe aquí lo es en su forma autoritaria.

Así que, contestando la pregunta inicial, no. Estoy segura, muy segura, de que miles de personas en el país no se sienten identificados con ningún partido político en México. La izquierda no tiene representantes reales, y tampoco la derecha.

La política mexicana podría bien ser explicada por el Chavo del 8:

“Bueno, la que parece de limón es de jamaica pero sabe a tamarindo. La que parece de jamaica es de tamarindo pero sabe a limón. Y la que parece de tamarindo es de limón, pero sabe a jamaica”.

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