Ciudad Juárez enfrenta una caída sostenida en su planta productiva. En los últimos siete meses, han desaparecido 451 empresas, una tendencia que golpea especialmente a las pequeñas y medianas. Aunque en el último reporte solo se registraron dos bajas más entre marzo y abril, los indicadores muestran una afectación profunda en sectores clave.
Las microempresas, aquellas con plantillas entre dos y cinco empleados, encabezan la lista de cierres, siendo la industria de la transformación la más castigada. Aunque algunos negocios del sector servicios han abierto en este mismo periodo, el saldo general sigue en números rojos.
De acuerdo con Marcelo Vázquez, presidente de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), el problema se ha intensificado por factores externos:“Muchas de estas empresas ya estaban debilitadas financieramente, y los nuevos aranceles aplicados desde Estados Unidos terminaron por cerrarlas. El impacto ha sido directo en el sector productivo más vulnerable”, señaló.
El corte más reciente indica que, desde octubre del año pasado cuando se alcanzó un máximo de 12 mil 005 empleadores formales, la cifra ha descendido a 11 mil 554. De las 451 empresas cerradas, 91 pertenecen a la industria manufacturera, 134 al comercio y 118 a los servicios personales y corporativos.
La situación en Juárez según (ARNIERM) refleja la fragilidad de las Pymes frente a presiones económicas externas, y enciende alertas sobre la necesidad urgente de fortalecer políticas de apoyo para este tipo de negocios que sostienen una parte esencial del empleo formal en la ciudad.