Ciudad Juárez.- Una familia originaria de Ciudad Juárez fue asesinada la noche del sábado 17 de mayo en una vivienda del condado de Tattnall, Georgia, en un crimen que las autoridades estadounidenses han calificado como un asesinato-suicidio. De acuerdo con la Oficina del Sheriff local y la Oficina de Investigaciones de Georgia (GBI), las víctimas fueron cuatro personas de origen hispano: dos mujeres, un joven y el presunto agresor, quien se quitó la vida tras perpetrar el ataque.
El crimen ocurrió alrededor de las 11:30 de la noche, cuando agentes respondieron a un reporte de disparos en una casa ubicada sobre Baxter Durrence Road, a las afueras de la ciudad de Glennville. Al arribar, los oficiales encontraron los cuerpos sin vida de Verónica Quevedo Torres (51 años), su hija Leslie Johana Marrufo Torres (24), el joven Edilberto Marín-Torres (18) y de Octavio Chihuahua Castro (42), pareja sentimental de Verónica y padrastro de los jóvenes, quien fue hallado con una herida de bala autoinfligida.
En la vivienda también se encontraban tres personas más, incluyendo una bebé de seis meses, hija de Leslie, quienes resultaron ilesos. Las autoridades informaron que el caso está siendo investigado bajo la hipótesis de violencia doméstica, aunque los motivos exactos aún no han sido esclarecidos. Los cuerpos serán trasladados a la sede forense del GBI en Pooler para la realización de autopsias.
Este hecho ha generado conmoción tanto en la comunidad hispana de Georgia como en Ciudad Juárez, donde amigos y familiares han exigido apoyo para la repatriación de los cuerpos y justicia para las víctimas. La tragedia ha reavivado el debate sobre los riesgos de violencia familiar dentro de comunidades migrantes en Estados Unidos y la necesidad de una respuesta institucional efectiva para prevenir estos casos.