H. Cd de Chihuahua.- Entre gritos de su nombre, pasos apresurados y la angustia marcada en el rostro de una madre que no ha dormido, decenas de personas recorren la colonia Unidad Proletaria con una sola misión: encontrar a Angelie Janeth Ibarra Álvarez, la niña de 10 años desaparecida desde ayer.
Policías municipales, agentes de la Fiscalía y al menos 55 vecinos se han unido al clamor desesperado por hallar a la pequeña.
La colonia entera parece haber detenido el tiempo: no hay conversaciones casuales, solo preguntas, lágrimas y la constante esperanza de escuchar una vocecita que responda al llamado.
María, la madre de Angelie, apenas se sostiene, pero no se detiene. “Tiene que estar aquí, en algún lado.
Mi hija me está esperando”, dice mientras camina sin rumbo fijo, mirando entre rejas, techos y lotes baldíos. Policías recorren casa por casa, tocan puertas, muestran fotografías, y los vecinos, solidarios y decididos, revisan callejones, patios y parques.
Una niña no puede desaparecer sin dejar rastro, se repiten todos, como un mantra contra el miedo. La colonia UP hoy es el epicentro de una lucha hecha de amor, desesperación y fe.
