H. Cd. de Chihuahua.- Un supuesto “olor a marihuana” detectado en uno de los baños del Senado de Filipinas desató un escándalo este lunes y llevó al presidente de la cámara alta, Francis Escudero, a decretar pruebas obligatorias de drogas para todos los empleados. El incidente provocó la dimisión de una trabajadora, Nadia Montenegro, quien afirmó ser inocente y denunció que solo portaba un vapeador de sabor a uva. Desde la oficina de seguridad del Senado, se abrió una investigación oficial tras el hallazgo del olor, mientras decenas de empleados optaron por realizar pruebas voluntarias.
Escudero señaló que el Senado realizará tests aleatorios obligatorios a todos los funcionarios y trabajadores, aunque no precisó si los senadores también estarán sujetos a ellos. Sin embargo, algunos legisladores, como Juan Miguel Zubiri, ya se sometieron voluntariamente a las pruebas junto con su personal, mientras que Raffy Tulfo expresó su disposición a hacer lo mismo. La situación generó un debate sobre la presión mediática y las medidas preventivas dentro de la cámara alta filipina.
Este hecho ocurre en un contexto histórico de fuerte lucha contra las drogas en Filipinas, marcada por la sangrienta cruzada del expresidente Rodrigo Duterte (2016-2022), que dejó entre seis mil y 30 mil muertos según cifras oficiales y ONG. Su sucesor, Ferdinand Marcos Jr., prometió continuar la lucha contra los estupefacientes sin derramamiento de sangre, aunque organismos como Amnistía Internacional han denunciado detenciones arbitrarias y abusos de poder, demostrando que el país sigue siendo escenario de polémicas políticas sobre el control de drogas.