Un yate valorado en unos 833,400 euros se hundió el lunes en la costa de Ereğli, provincia de Zonguldak, Turquía, apenas 15 minutos después de haber sido botado al agua, en lo que se conoce como el proceso de botadura, es decir, cuando una embarcación toca el mar por primera vez tras su construcción.
La embarcación, construida en un astillero local, había completado el proceso de botadura y comenzó a navegar cuando, a unos 200 metros de la costa, comenzó a inclinarse de forma repentina. Pese a los intentos del equipo a bordo para estabilizarla, el yate terminó volcándose y hundiéndose en cuestión de minutos.
En la embarcación se encontraban el propietario, el capitán y dos tripulantes, quienes lograron lanzarse al mar y nadar hasta la orilla sin sufrir lesiones graves. El hundimiento fue presenciado por varias personas que se encontraban en la zona y que captaron la secuencia en video con sus teléfonos móviles. Las imágenes se viralizaron rápidamente en redes sociales.
Los primeros informes técnicos apuntan a un posible fallo de ingeniería, aunque no se descartan otras hipótesis. La Guardia Costera de Turquía se desplazó al lugar junto a ingenieros del astillero para comenzar una investigación que permita esclarecer las causas exactas del accidente.
#HCHInternacionales | Un yate de lujo valorado en 1,2 millones de dólares se hundió tan solo 15 minutos después de ser botado en la provincia de Zonguldak, al norte de Turquía. El propietario y la tripulación nadaron hasta la orilla y no se reportaron víctimas.
— HCH Televisión Digital (@HCHTelevDigital) September 3, 2025
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