La Fiscalía General de la República (FGR), a través de su Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), ejecutó un cateo en una estación de servicio de la ciudad de Chihuahua, donde se aseguraron 9 bombas despachadoras de combustible y diversa documentación, tras detectarse irregularidades en la venta de gasolina a los consumidores.
De acuerdo con la información oficial, la diligencia se originó a partir de una denuncia presentada por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en la que se alertaba que en la gasolinera señalada se vendían litros incompletos, en perjuicio directo de los clientes. Con base en los datos de prueba recabados, un juez de distrito especializado en el Sistema Penal Acusatorio autorizó la orden de cateo, que fue cumplimentada por agentes de la Policía Federal Ministerial de la Agencia de Investigación Criminal, personal de la Coordinación de Servicios Periciales y un defensor de Profeco.
Durante la inspección, los elementos federales aseguraron nueve dispensarios de gasolina, diversa documentación contable y un teléfono celular que presuntamente era utilizado para manipular el funcionamiento de las bombas. Tanto el inmueble como los equipos quedaron bajo resguardo y con sellos de aseguramiento.
La FGR informó que lo incautado quedó a disposición del Ministerio Público Federal, que integra la carpeta de investigación correspondiente contra quien o quienes resulten responsables. El caso podría derivar en sanciones por el delito de suministro de combustibles en cantidades inferiores a las registradas en los instrumentos de medición, conducta tipificada y castigada por la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos Cometidos en Materia de Hidrocarburos.
La autoridad federal destacó que estas acciones buscan garantizar los derechos de los consumidores y combatir prácticas fraudulentas en el sector energético, por lo que reiteró el llamado a la ciudadanía para denunciar de manera presencial o anónima cualquier irregularidad en estaciones de servicio.