H. Cd de Chihuahua.- El director del Instituto Municipal de Pensiones (IMPE), Juan González Villaseñor, reconoció que el organismo atraviesa por una situación económica complicada, derivada del incremento en los costos de servicios médicos, medicamentos y material de curación, que este año registraron la inflación más alta en dos décadas.
El funcionario detalló que el presupuesto anual del instituto ronda los 700 millones de pesos, de los cuales cerca de 200 millones se destinan a hospitales, y aclaró que el IMPE solo opera con recursos municipales, sin apoyo estatal ni federal.
A ello se suma el aumento de pacientes con enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión y cáncer, lo que ha generado un gasto mayor al que pueden cubrir las cuotas de los trabajadores y la aportación del municipio.
González Villaseñor explicó que, en varias ocasiones, el IMPE se ha visto obligado a posponer cirugías programables o electivas, es decir, aquellas que no ponen en riesgo inmediato la vida de los pacientes, como prótesis de rodilla o procedimientos de accesos benignos.
Sin embargo, enfatizó que las operaciones urgentes, como las derivadas de accidentes, apendicitis o fracturas, se realizan de manera inmediata.