La cantante Belinda presentó una demanda formal contra Lupillo Rivera por los delitos de violencia digital y mediática, en respuesta a la publicación de la autobiografía “Tragos amargos”. La demanda, que acusa una vulneración de la vida privada de la cantante, fue formalizada ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México el pasado 2 de octubre.
El despacho Maceo, Torres & Asociados, que representa a Belinda, informó que la Fiscalía ya concedió medidas de protección en favor de la cantante. Entre las disposiciones impuestas a Rivera se encuentran la prohibición de acercarse o intentar comunicarse con la intérprete, la obligación de abstenerse de cualquier conducta ofensiva y la exigencia de eliminar de sus redes sociales todo el contenido en el que haga referencia a la cantante.
El conflicto se origina en la autobiografía de Lupillo Rivera, donde narra detalles privados de la relación sentimental que mantuvieron a partir de 2019, cuando ambos coincidieron como coaches en el programa “La Voz”.
El despacho legal de Belinda enfatizó que “la libertad de expresión no es absoluta, y no puede invocarse para justificar actos que generan violencia digital y explotación indebida de la imagen”, advirtiendo que tales conductas constituyen violencia de género y suponen una violación a los derechos humanos.
Lupillo Rivera confirmó la relación, que duró aproximadamente cinco meses, y llegó a tatuarse el rostro de Belinda en el brazo. Sin embargo, ante el riesgo legal, el cantante no ha emitido declaraciones sobre la denuncia, aunque en una entrevista previa afirmó: “yo no le pido permiso a nadie”.
