Un grupo de trabajadores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en Juárez llevó a cabo este miércoles un paro de brazos caídos como parte de un movimiento nacional para exigir la aplicación del aumento salarial pendiente y la restitución de prestaciones laborales.
Desde temprana hora, las oficinas permanecieron abiertas, pero sin operación en áreas clave, lo que provocó demoras en trámites como la emisión de la firma electrónica, la inscripción al RFC y la validación de comprobantes fiscales.
El paro responde a la falta de implementación del incremento del 12 % al salario, autorizado desde enero de 2025, así como a diferencias en prestaciones y cargas de trabajo entre distintas áreas operativas del SAT. Los empleados señalaron que también se han visto afectados por recortes de personal y horarios extendidos sin compensación adicional.
En Ciudad Juárez, la participación incluyó a una decena de trabajadores en los accesos principales de las oficinas, mientras que a nivel nacional se estima que más de siete mil empleados se sumaron al movimiento en diversas sedes, incluyendo Guadalajara, Guanajuato y Chihuahua capital.
Entre las demandas, los trabajadores destacan la regularización de horarios, el restablecimiento de prestaciones eliminadas, la dotación de insumos necesarios para el desempeño de sus labores y condiciones adecuadas para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
El movimiento se mantiene de manera pacífica y busca que el gobierno federal abra una mesa de diálogo para atender el pliego de solicitudes y evitar la ampliación de las acciones de protesta.
Mientras el paro continúe, se espera que la atención al público siga limitada, lo que podría generar retrasos en la realización de trámites fiscales. Los empleados indicaron que continuarán con las medidas hasta recibir una respuesta formal por parte de las autoridades.