Juárez, Chih.- Paisanos provenientes de Hidalgo, Guanajuato y el Estado de México fueron identificados como las víctimas de un grupo de ocho presuntos secuestradores, quienes los mantuvieron privados de la libertad durante varios días en una vivienda habilitada como casa de seguridad, ubicada en la colonia Tierra Nueva en Juárez.
De acuerdo con la investigación, dos hombres de 18 y 20 años y una mujer de 29 fueron retenidos en contra de su voluntad en el domicilio marcado con el número 1414 de la calle Paseo Despertar. Durante su cautiverio, las familias de las víctimas fueron obligadas a pagar rescates que oscilaron entre los 2 mil y 5 mil dólares para poder garantizar su liberación.
Una vez que los pagos fueron realizados, los captores abandonaron a las víctimas en un parque situado a tan solo 150 metros de la casa de seguridad. Este error facilitó que los afectados pudieran solicitar auxilio a elementos de la Policía Municipal que se encontraban realizando recorridos de vigilancia en la zona, lo que derivó en un operativo inmediato para ubicar y detener a los presuntos responsables.
Los ocho detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad ministerial y presentados en audiencia inicial ante la jueza de control Norma Angélica Aguilar Castañeda, recientemente nombrada en su cargo. Durante la diligencia, el Ministerio Público formuló cargos por secuestro agravado, sin embargo, el desarrollo de la audiencia se vio marcado por diversos tropiezos procesales y por la actuación del defensor de los imputados, quien insistió en alegar una detención ilegal sin aportar pruebas que respaldaran su teoría.
El abogado defensor permitió que sus representados declararan, aunque únicamente respondieron a un par de preguntas de su parte, negándose a contestar los cuestionamientos de la Fiscalía. La jueza Aguilar Castañeda determinó que la audiencia continuará en los próximos días para resolver la situación jurídica de los imputados, quienes permanecen bajo la medida cautelar de prisión preventiva.
Las autoridades estatales destacaron que este caso evidencia el riesgo que enfrentan migrantes y ciudadanos provenientes de otras entidades que transitan por Chihuahua, al ser blanco de grupos delictivos que buscan obtener ganancias rápidas mediante secuestros exprés.
Asimismo, hicieron un llamado a denunciar cualquier actividad sospechosa en colonias donde se detecten viviendas que pudieran ser utilizadas como casas de seguridad.
