Un hundimiento se registró en la carpeta asfáltica del Puente de la Concordia en la alcaldía Iztapalapa, en la misma zona donde ocurrió la explosión de una pipa de gas el pasado 10 de septiembre. Aunque inicialmente se reportó como un socavón, autoridades indicaron que se trata de la activación de una grieta geológica atribuida a las intensas lluvias.
La alcaldía de Iztapalapa informó que la oquedad tiene 1.5 metros de radio, con una proyección de agrietamiento de 6 metros y una profundidad de 2 metros. La trayectoria de la grieta mide 138 metros y ya estaba marcada en el Plan de Riesgos que fue enviado a las Secretarías de Gobierno y de Obras de la capital. Se aclaró que la aparición de la grieta es producto de una trayectoria de agua pluvial que busca su cauce, y que no tiene ninguna relación con los acontecimientos del pasado 10 de septiembre.
Equipos de la Secretaría de Gestión Integral del Agua, la Secretaría de Seguridad Ciudadana y Protección Civil acudieron al punto para abanderar la zona, mitigar riesgos y realizar la evaluación pertinente. La alcaldía acordonó el área para impedir el paso vehicular.
El socavón se formó a unos metros de los memoriales que los vecinos instalaron para recordar a las víctimas del estallido. La zona es una vía clave que conecta con la autopista México-Puebla y tiene constante paso de vehículos pesados.
Descartan vínculo con la explosión de la pipa
Este martes, la titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Bertha Alcalde Luján, aseguró que la explosión de la pipa de gas no se originó por un bache o socavón en la zona del Puente de la Concordia. Indicó que los peritos de la Fiscalía realizaron inspecciones inmediatas, acreditando que no existían baches ni daños en la superficie de rodamiento al momento del percance. La funcionaria también desmintió que la vía haya sido pavimentada posteriormente.