El cometa interestelar 3I/ATLAS se encuentra realizando su paso por el sistema solar, un evento astronómico que ha desatado gran interés por su origen y sus anomalías. Este cuerpo, compuesto por hielo, polvo y rocas, es un visitante que proviene de fuera de nuestro sistema solar y pasará a una distancia de 270 millones de kilómetros de la Tierra, sin representar riesgo alguno.
Sin embargo, el cometa ha generado controversia por el físico de Harvard Avi Loeb, quien sostiene que 3I/ATLAS podría no ser un cuerpo natural, sino un objeto tecnológico impulsado por energía nuclear. Las anomalías detectadas por Loeb incluyen un brillo frontal inusual, una trayectoria extremadamente precisa y una intensidad lumínica elevada comparable a una fuente nuclear compacta.
La NASA activó la Defensa Planetaria ante el paso del cometa, según un boletín oficial del Minor Planet Center de Harvard. Aunque no se ha detectado peligro de impacto, este protocolo se activó para monitorear y evaluar objetos que podrían representar un riesgo potencial para la Tierra.
El cometa, con una edad estimada que supera los 10 mil millones de años, alcanzó su punto máximo de aproximación al Sol el 30 de octubre de 2025. Los científicos estiman que el cometa fue expulsado desde una región lejana de la Vía Láctea.




 
				 
															 
								 
								 
								




